Vistas:0 Autor:Editor del sitio Hora de publicación: 2025-08-18 Origen:Sitio
En equipos industriales, el daño a la superficie de las piezas de trabajo es un problema común, especialmente en entornos con altas cargas y alto desgaste. Para reparar piezas de trabajo dañadas, la tecnología de pulverización térmica que combina recubrimientos a base de níquel-aluminio con polvo compuesto de óxido de titanio ha atraído gradualmente la atención. Entonces, ¿qué tan efectivo es este recubrimiento? ¿Cómo funciona en la reparación de piezas de trabajo dañadas?
El recubrimiento de níquel-aluminio, debido a su excelente resistencia al desgaste y resistencia a la corrosión, se ha convertido en una opción ideal para reparar piezas de trabajo. Mediante el uso de la tecnología de pulverización térmica, agregar polvo compuesto de óxido de titanio a los recubrimientos a base de níquel-aluminio puede mejorar aún más el rendimiento de los recubrimientos. La adición de polvo compuesto de óxido de titanio no solo mejora la dureza del recubrimiento, sino que también mejora su resistencia a alta temperatura, lo que permite que la pieza de trabajo reparada mantenga un buen rendimiento en condiciones de trabajo extremas.
La adición de polvo compuesto de óxido de titanio mejora significativamente la resistencia al desgaste y la resistencia a la oxidación del recubrimiento. Esto significa que las piezas de trabajo que han sufrido dicho tratamiento de reparación pueden reducir efectivamente el desgaste y la corrosión durante el uso, extendiendo así su vida útil. Además, en comparación con los métodos tradicionales de reparación de procesamiento mecánico, la tecnología de reparación de pulverización térmica tiene una mayor eficiencia y menor costo.
La combinación de recubrimientos a base de níquel-aluminio y polvos compuestos de óxido de titanio demuestra excelentes efectos de reparación. A través de la tecnología de pulverización térmica, las piezas de trabajo dañadas no solo se pueden reparar efectivamente, sino que también se puede mejorar su rendimiento general, lo que garantiza el funcionamiento estable del equipo bajo altas cargas. Por lo tanto, para el equipo industrial que requiere mantenimiento y reparación frecuentes, este método de reparación es, sin duda, una opción digna de considerar.